lunes, julio 13, 2009

ENCUENTRO CON JAMES ROLLINS


El viernes pasado tuvo lugar en la librería Mysterious Bookshop de Nueva York un encuentro con varios escritores invitados a Thrillerfest 2009, el festival de novela de misterio y aventuras que se celebra cada año en esta ciudad.

La librería es de por sí una joya para todos los amantes del género: estanterías que llegan hasta el techo, libros nuevos, antiguos, una sección dedicada al pulp, otra sólo para Sherlock Holmes y Sir Arthur Conan Doyle, y una decoración muy apropiada que incluye esqueletos ahorcados y otras lindezas. También hay una buena colección de libros firmados por autores como Robin Cook, Douglas Preston y Lincoln Child, James Patterson, etc.




Yo fui allí con el expreso deseo de conocer a James Rollins, el autor de la serie Sigma Force así como de la novelización de la última película de Indiana Jones. Rollins es un veterinario, aventurero y novelista que escribe dos libros al año y con quien compartí editorial en España, ya que su "Map of bones" (aquí titulado "El sarcófago de los reyes magos") y mi Isis Dorada fueron publicadas por Suma de Letras.



A Jim le hizo ilusión enterarse de esto, así como de que fue su libro el que me hizo conocer el sello que publicó mi opera prima. A mí charlar un rato con él, compartir una copa de vino (aunque él sólo tomó Cocacola Light) y pedirle que me dedicara su último libro: "The Doomsday Key". De esta manera, Rollins y servidor somos ya como hermanastros de papel, o algo así, uno a cada lado del charco.

Thanks, Jim.

Más información sobre James Rollins en: www.jamesrollins.com

miércoles, julio 08, 2009

ESCRIBIENDO EN NUEVA YORK


Hace ya más de un año que puse los pies en esta zona del mundo para escribir mi anterior novela. Aquella vez fue en una casita unifamiliar de Connecticut, donde terminé una historia juvenil ambientada en el mundo de los juegos de rol por Internet, con personajes de la zona y una ambientación que mezclaba un lugar nacido de la fantasía con lugares tan reales como Michigan o Chicago.

Ahora he vuelto a los Estados Unidos. Estoy en Nueva York, viviendo en la planta 16 de un edificio de 20 pisos, rodeado de restaurantes de comida rápida, supermercados que abren toda la noche y cafeterías que sirven sus bebidas en vasos de papel, muy cerquita de Central Park. La historia que estoy escribiendo no se desarrolla aquí, pero decía Hemingway que no había nada mejor que viajar a algún lugar para escribir sobre otro lugar. En España escribí MUSEUM, una historia ambientada en Nueva York; y ahora en Nueva York estoy escribiendo una historia que se desarrolla en España. Paradojas de la literatura.

El año que viene tal vez vuelva por aquí para continuar la tradición. A ser posible invitado por mis, de momento, inexistentes editores americanos. Pero la literatura también es sueño, y por soñar que no quede.